Cerca de medio millón de dólares otorgará el Fondo del Embajador de EE UU para ejecutar trabajos de conservación de las litoesculturas del sitio arqueológico Sechín, en Áncash.
El monumento arqueológico Sechín, ubicado en la provincia ancashina de Casma, es uno de los ganadores del concurso de proyectos del Fondo del Embajador para la preservación del patrimonio cultural 2021 que otorga la Embajada de Estados Unidos en Perú.
El anuncio de los proyectos ganadores se efectuó el lunes 27 en una ceremonia desarrollada en el sitio arqueológico Sechín y que contó con la presencia del ministro de Cultura, Ciro Gálvez; y de la embajadora de Estados Unidos en Perú, Lisa Kenna.
El monumento Sechín recibirá USD 414,637 (más de S/. 1‘708,000.00 aproximadamente) para financiar los trabajos de conservación de las litoesculturas ubicadas en Cerro Sechín.
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El proyecto se sustenta en un enfoque integral y multidisciplinario que incorpora la participación de la comunidad local, ubicada cerca del sitio arqueológico, para su capacitación y futura sostenibilidad.
El proyecto será implementado por el World Monument Found, junto con otros sitios ubicados en las regiones de Cusco, Piura y Puno, detalló la embajadora estadounidense Lisa Kenna quien llegó hasta Casma para dar el anuncio.
En la ceremonia el ministro de Cultura, Ciro Gálvez expresó que “este es un momento histórico e importante”, tras agradecer el apoyo de la Embajada de Estados Unidos.
Luego del acto, la comitiva visitó el museo Max Uhle de Casma y el complejo arqueológico Chankillo, declarado recientemente como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco.
Sechín es uno de los cuatro ganadores del Fondo del Embajador, un programa emblemático de la Embajada de los Estados Unidos que permite mostrar el respeto, admiración e interés de los Estados Unidos por la preservación el milenario patrimonio cultural del Perú.
Sitio arqueológico
El complejo arqueológico Sechín ocupa alrededor de cinco hectáreas; sin embargo, el sector de monumentos se agrupa en una sola hectárea. El edificio principal o central está hecho de piedra y encierra a otro edificio o estructura de adobes cónicos.
A los flancos del conjunto se hallan otros dos edificios (edificio A y edificio C) y dos plataformas (plataforma Julio C. Tello y plataforma Rafael Larco, otro de los importantes investigadores de esta cultura).
El edificio principal es rectangular, con esquinas redondeadas y con un muro perimétrico de monolitos o estelas grabadas, que es de construcción más temprana. Una doble escalera lleva a su cima, a cuatro metros de altura, pero ya no existen allí edificios dado que fueron arrasados al parecer por aluviones vinculados al impacto de El Niño costero.
Los personajes representados en los monolitos de las fachadas son de dos clases. Los guerreros-sacerdotes (ataviados con un arma o cetro) y las víctimas descuartizadas o sus despojos (principalmente cabezas, extremidades, ojos ensartados, intestinos, vértebras y vísceras), creando una escena macabra. Todas estas figuras representan a humanos, sin presencia de semidioses o animales.
En el edificio interior, construido con adobe, la decoración principal y mejor conservada es la que representa a dos peces mitológicos, realizados mediante líneas labradas sobre la pared de barro húmedo. Otra figura, que representa a un hombre ensangrentado, es secundaria. Estos motivos relacionan el mar, las lluvias y los sacrificios humanos.
Cerca del complejo Sechín descubierto por Julio C. Tello se encontraron posteriormente otros dos complejos arqueológicos denominados Sechín Alto y Sechín Bajo.