Región alberga rica herencia cultural, sitios arqueológicos, museos, playas, áreas protegidas y sabrosa culinaria..
Chiclayo, conocida también como la «Ciudad de la Amistad», gracias al carácter hospitalario y servicial de sus habitantes, alberga predios de gran belleza arquitectónica como su catedral.
Visitar la región Lambayeque es viajar en el tiempo y comprobar la formidable herencia cultural de grandes civilizaciones ancestrales como Mochica y Sicán, así como la belleza de su capital Chiclayo y otras urbes provinciales, sus notables museos, apacibles playas, alegres danzas y deliciosa gastronomía que impulsan a conocer este maravilloso destino y joya turística del norte peruano.
Creado como departamento del Perú el 7 de enero de 1872, Lambayeque tiene una extensión de 14,231 kilómetros cuadrados y está conformado por las provincias de Chiclayo, Lambayeque y Ferreñafe. Limita al norte con Piura, al este con Cajamarca, al sur con La Libertad y al oeste con el océano Pacífico.
Protagonista en la independencia
Lambayeque tuvo un rol estelar en el proceso de la independencia nacional. Los historiadores refieren que el cabildo de Chiclayo proclamó la independencia el 31 de diciembre de 1820, encabezado por el alcalde Santiago Burga y el gobernador José Leonardo Ortiz; mientras que, en Ferreñafe, el cura Mariano Bonifaz logró que el cabildo de dicha ciudad declarase la independencia el 10 de enero de 1821 y Motupe lo hizo en los primeros días de enero.
Atractivos turísticos
A continuación, los cautivantes atractivos turísticos que debes conocer en tu visita a Lambayeque.
Chiclayo
Fundada como una villa por los conquistadores españoles en 1720 con el nombre de “Santa María de los Valles de Chiclayo”, esta localidad fue elevada a la categoría de ciudad, el 4 de abril de 1835, por el entonces presidente Felipe Santiago Salaverry. Dada su importancia, se convirtió en la capital del departamento de Lambayeque y vio nacer a importantes personajes de la historia peruana.
Chiclayo, conocida también como la «Ciudad de la Amistad», gracias al carácter hospitalario y servicial de sus habitantes, ocupa actualmente el cuarto lugar entre las más pobladas del Perú y es una de las más importantes del norte del país.
A continuación, conoce los principales atractivos turísticos de Chiclayo.
Centro histórico
Destaca su Catedral, conocida como Santa María, de estilo neoclásico y construida en 1869 siguiendo el diseño y planos del célebre arquitecto francés Gustavo Eiffel. El pórtico principal es de dos cuerpos, sostenido el primero por columnas toscanas que se anteponen a los tres arcos de entrada. El segundo pórtico presenta capiteles corintios y se aprecian balcones o miradores. A ambos lados de la fachada destacan campanarios rematados con pequeñas cúpulas. En su interior, dividido en tres sectores, destaca la hermosa talla del Cristo Pobre y la Casa de Antonio.
Otro edificio importante es el Palacio Municipal, que se levanta en el ala norte del parque principal, ubicado en la calle San José 823. Construido en 1919, costó algo más de 30,000 libras de oro de la época. Tiene un estilo republicano con amplios ventanales y puertas de fierro forjado. Fue destruido en gran medida por un incendio en octubre de 2006 y luego restaurado. En la actualidad funciona como museo.
La Plaza de Armas fue construida en dos tramos. Cuenta con una pileta provista de tres válvulas de agua que dan origen a tres chorros de agua que forman la bandera del Perú. En los alrededores se encuentran la Catedral, el Palacio Municipal, los antiguos Cine Teatro Tropical y Colonial, así como edificios republicanos donde actualmente funcionan dependencias públicas y negocios diversos.
Otro escenario importante de la ciudad de Chiclayo es la plazuela Elías Aguirre, ubicada entre las calles Elías Aguirre y San José. Lleva el nombre del héroe que sucumbió junto al almirante Miguel Grau en el combate de Angamos, durante la Guerra del Pacífico, el 8 de octubre de 1879. Se trata de la primera plaza que divisaba el viajero cuando bajaba del tren en la estación de ferrocarril de Eten. La plazuela es obra del escultor peruano David Lozano y su construcción data de 1924.
También resulta interesante visitar es la biblioteca municipal José Eufemio Lora y Lora. Cuenta con una de las mejores infraestructuras de su tipo en el Perú. La colección de libros que posee supera los 50,000 títulos.
Además de la Catedral, destacan iglesias como la capilla La Verónica, localizada en la calle Torres Paz 294. Fue construida a fines del siglo XIX y declarada monumento histórico nacional en 1987. El altar mayor y el retablo adyacente presentan un revestimiento de plata y pan de oro.
Otro notable templo es la Basílica San Antonio, construida en 1949 y se ubica entre la calle Torres Paz y la Avenida Luis Gonzáles. Bautizada con el nombre de “San Antonio de los Padres Descalzos de Chiclayo”, posee una arquitectura moderna y sencilla. La nave principal es bastante amplia, presenta arcos de medio punto y en su altar mayor destaca el Cristo Crucificado articulado, que es una escultura en madera policromada que se mueve y es muy venerada por los feligreses católicos de Chiclayo.
Museos
Al llegar a la región Lambayeque es imprescindible visitar los museos que han convertido a esta provincia y a la región Lambayeque como el más importante destino peruano en el ámbito arqueológico y museográfico.
El museo más sobresaliente es Tumbas Reales de Sipán, ubicado en la ciudad de Lambayeque e inaugurado el 8 de noviembre de 2002. Conserva las osamentas y ajuar funerario con más de 600 piezas de oro, plata y piedras preciosas pertenecientes al Señor de Sipán, poderoso jerarca mochica que gobernó en el siglo III d.C., descubiertos por los arqueólogos Walter Alva y Luis Chero Zurita, en 1987.
Es el más visitado de Lambayeque y uno de los más concurridos del Perú, llegando a recibir más de 180,000 personas en 2018. Dada su importancia como patrimonio y descubrimiento arqueológico, comparado con el faraón egipcio Tutankamón, se han realizado exhibiciones del Señor de Sipán en diversos países del mundo.
Otros museos emblemáticos son el centenario Brüning, Sicán, Túcume, Huaca Rajada-Sipán y Chotuna Chornancap, los cuales, al igual que Tumbas Reales de Sipán, vienen siendo cada vez más visitados por la población, gracias a la Ley N° 30599 y la iniciativa Museos Abiertos del Ministerio de Cultura. Ello permite el ingreso gratuito, el primer domingo de cada mes, a estos recintos y a sitios arqueológicos donde también se organizan entretenidas actividades culturales.
Playas
La región Lambayeque posee un litoral en el que destacan balnearios emblemáticos como Pimentel, donde se aprecia su centenario muelle y las olas propicias para la práctica de deportes náuticos como la tabla y la pesca recreativa. También es posible apreciar a los ancestrales “caballitos de totora” que son testimonio de la cultura Mochica y de la legendaria aparición de su fundador Naylamp y su séquito, provenientes del océano.
Otra playa importante es Eten, una de las más extensas del litoral lambayecano y muy concurrida por la población gracias a sus aguas tranquilas. Por el norte se conecta con la desembocadura del río Reque, por lo que se forma un ecosistema rico en especies animales y vegetales.
Otros balnearios destacados son Las Rocas, caleta Santa Rosa, playa Hermosa, caleta San José, playa Hondo, Monsefú, playa Lobos, Media Luna, Santuario, La Bota y Pedregal.
Zaña
Esta localidad lambayecana estuvo habitada en la época prehispánica por población de origen Mochica, conocidos como “Sañap”, quienes vivían en asentamientos ubicados en las faldas del cerro Corbacho.
Con la llegada de los conquistadores españoles se funda la ciudad, el 29 de noviembre de 1563, con el nombre de “Villa Santiago de Miraflores de Zaña” por el capitán Baltasar Rodríguez. La elección de este lugar para constituirse en una urbe respondió a su excelente ubicación a medio camino entre el mar y la sierra, así como por el buen sistema de riego elaborado por los mochicas e incas, y por tener muy cerca un río que permitió el desarrollo de la naciente ciudad.
Su estratégica ubicación, en medio de una red de vías comerciales, hizo que Zaña llegara a ser una ciudad opulenta hasta principios del siglo XVIII, llegando a ser llamada “Sevilla del Perú”. La prosperidad de esta ciudad del norte peruano se expresó en sus iglesias de estilo Barroco, de las cuales se conservan actualmente cuatro: La Merced, San Agustín, San Francisco y la Iglesia Matriz.
El 15 de marzo de 1720 ocurrió un enorme crecimiento del caudal y desborde del río Zaña, lo que provocó la destrucción de casi toda la ciudad. Ello obligó a los sobrevivientes a desplazarse de la zona arrasada algunos kilómetros y construir una nueva urbe. Otros migraron a las ciudades de Ferrreñafe, Lambayeque y Túcume, principalmente.
Zaña es, actualmente, uno de los veinte distritos de la provincia de Chiclayo, capital del departamento de Lambayeque. Tiene una superficie total de 313.9 kilómetros cuadrados y una población estimada en 11,617 habitantes, según el Censo del 2017 ejecutado por el INEI.
Inmigración africana
Tras haber casi diezmado a la población indígena originaria en esta zona en las encomiendas, los españoles trajeron durante el Virreinato a esclavos africanos en una inmigración forzada para encargarse del trabajo agrícola y de servicio en las haciendas.
Con la independencia nacional, en 1821, y durante la República se produjo la abolición de la esclavitud en el Perú. Como consecuencia de ello, la población afroperuana atravesó un proceso de integración al resto de la población del país. Actualmente existe una importante presencia afroperuana en diversos ámbitos de la sociedad y su cultura constituye un aporte fundamental de identidad regional y nacional.
Familias afrodescendientes en Zaña son las que llevan apellidos como Cosío, Briones, Urbina, Montes de Oca, entre otros, cuyos apellidos son españoles pero sus descendientes son afroperuanos.
Reconocimiento mundial
En 2017, el distrito chiclayano de Zaña fue reconocido mundialmente como “Sitio de la Memoria de la Esclavitud y la Herencia Cultural Africana” por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
En el documento remitido al Perú, el 12 de julio de 2017, la Unesco sostiene que la declaración a Zaña responde a que se le considera como un referente de la memoria asociado a la “Ruta del Esclavo, Resistencia, Libertad y Patrimonio” en el Perú.
Asimismo, este reconocimiento otorgado a Zaña responde a que se le considera un lugar de integración, de multiculturalidad y de memoria. Esta distinción se inscribe dentro del Programa Memoria del Mundo de la Unesco y tiene el mismo estándar que otros reconocimientos de patrimonio mundial.
Patrimonio nacional
El distrito de Zaña fue reconocido también por el Ministerio de Cultura como «Repositorio Vivo de la Memoria Colectiva Afroperuana», mediante Resolución Ministerial N° 187-2015-MC, por constituir uno de los núcleos de la memoria histórica y artística de la presencia afroperuana en el Perú.
Gastronomía lambayecana
La gastronomía regional de Lambayeque es una de las más variadas, originales y sabrosas del Perú. Heredera de la ancestral civilización Mochica y enriquecida con el aporte europeo desde la conquista española, la culinaria chiclayana cuenta con una gran cantidad de potajes basados en productos locales emblemáticos como el zapallo loche.
El zapallo loche es un fruto originario que se cultiva en los valles de Mórrope, Túcume, Íllimo, Ferreñafe, Pítipo, Pimentel y Monsefú. La existencia de este vegetal hace 3,000 años atrás se testimonia en semillas y ceramios inspirados en este fruto que fueron descubiertos junto con personajes emblemáticos como el Señor de Sipán.
Entre los platos más emblemáticos destacan arroz con pato, cabrito a la chiclayana, espesado (guiso elaborado con choclo molido y acompañado con carne de res y arroz amarillo), tortilla de raya, pellejo de cerdo frito con zarza de cebolla, cebiche de caballa salada, cebiche de chinguirito (carne de raya secada al sol), chirimpico (guiso preparado a base de menudencias de cabrito), chicharrón de pescado, parihuela chiclayana (caldo concentrado de pescado y mariscos).
Entre los postres destacan el icónico “King Kong” (turrón relleno de manjar blanco y mermelada de piña, membrillo, tamarindo u otras frutas), la naranja rellena (naranja agria rellena de manjar blanco o miel), la torta de natilla (dulce cremoso que se hace con leche, huevos y azúcar, cocido a fuego lento), entre otros. Y las bebidas típicas están representadas por la chicha de jora, obtenida de la fermentación de la mezcla de maíz de jora, chancaca, azúcar rubia y agua.
Ruta Moche
La región Lambayeque forma parte de la Ruta Moche, circuito turístico que recorre cada zona arqueológica, natural y cultural, donde se desarrolló la cultura Mochica y periodos adyacentes.
El camino hacia la Ruta Moche se inicia en el departamento de La Libertad, donde se apreciará la riqueza cultural de Chan Chan, para luego terminar en el departamento de Lambayeque, conocido por albergar la famosa tumba del Señor de Sipán.